Si una escritora de ti se enamora
¡Imagina que algazara,
que júbilo y que emblema!
Tomar parte de la inspiración del escribano.
Contrariar a la blasfemia.
Ser por todos conocido,
cuando por una se es nombrado;
sempiterno a los traspases del tiempo
y por ella venerado.
Si una escritora de ti se enamora,
aseguro que ni en mil vidas mueres,
serás fervientemente etéreo y enalzado,
al tal sublimidad sin importar quien fueres.
Atrévete mi numen a quedar atrapado;
primero entre mis sueños, luego en estrofas,
y formar parte de la estructura dimorfa,
desnudar la armadura que te mantiene acorazado.
Pero te niegas vilmente a las tentaciones
de ser con beldad plasmado,
y te me postras tácitamente
a pertenecer inmaculado.
¿Y?
Y así...
¡Y así no!
Y así, así no se puede.
Por: Abril Martz Parra.
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